5 de mayo de 2013

San Idad

Hablar de sanidad o control sanitario en china es como hablar del huevo y la gallina y no "aclararse" . A este lado del mundo ese vocablo tiene que digievolucionar y mucho. No es que usen aceite de camión para cocinar,  es que directamente abren el cárter y llenan las botellas. A veces no me explico cómo es posible que ante tanto descontrol sanitario no le de a la gente las cagaderas de la muerte. Aunque he de confesar que el vecino alguna noche que otra, pega unas vomitonas que parece que quiera sacar a Satanás,  Son Goku y Vegetta, por la boca, como si fuera el mismísimo Bu!
Dejando de lado los agonizantes temas del vecino, aquí la cosa es delicada. Las verduras tienen grandes cantidades de pesticidas prohibidos hace años en Europa, la leche más bebida en el país (伊利 y 蒙牛) han tenido varias denuncias por intoxicaciones y dios sabe que más, el agua del grifo mejor no beberla sin hervirla, y los pollos están como bien sabéis... locos...
Porqué os comento esto hoy?
Pues bueno, hasta esta semana que abrí los ojos a la realidad después de los consejos alimenticios de mis compatriotas chinos, yo bebía de esa leche tan rica y nívea, me hacia el arroz con agua clara del grifo, no lavaba en exceso la fruta y solía comer pollo porque me encanta la pechuga...
Espero a mi madre no le de un "chungo"  después de leer esto.
Pero no os preocupéis, no os hablo desde el más allá, aunque seguro cuándo me veáis de noche, brillaré cómo el señor Barns, y como dice la canción, seré "la reina de la noche".
No os asustéis, si cerráis los ojos y coméis con el paladar mientras os tapáis los ojos de noticias, todo sabe rico rico, y un poco picante;)
 
Recordad... No es oro todo lo que reluce, ni leche todo lo que da la vaca.... a veces da cagaderas:)
 
 
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